Cómo implementar un Plan de Bienestar desde cero

Cuando hablamos de Plan de Bienestar, hablamos de una pieza estratégica fundamental para atraer nuevos talentos, motivar y retener a los trabajadores actuales. 

¿De qué trata un Plan de Bienestar? 

Es un plan estratégico que implementan los departamentos de Recursos Humanos que se componen de políticas, beneficios y programas, diseñados de forma completa, comprensible y justa para sus trabajadores. 

Cuando se aplica un Plan de Bienestar, se promueve la eficiencia y la productividad en los empleados, como también se genera una mejora en el trabajo en equipo de los diferentes departamentos. 

¿Qué se debe tener en cuenta a la hora de implementar un plan de bienestar?

Cuando se crea un Plan de Bienestar desde cero, es importante realizar un diagnóstico de la situación actual, diseñar el Plan que se ajuste a tus trabajadores, comunicar de forma eficiente las acciones que se llevarán a cabo y una vez implementado el plan es necesario hacer un seguimiento del mismo y medir. 

Es importante que el plan sea personalizado, es decir, que se ajuste a las necesidades reales de tus empleados para que se apliquen los beneficios y acciones que verdaderamente sean importantes para tus trabajadores. 

Identifica las necesidades de tus trabajadores. 

Antes de implementar tu plan de bienestar, debes estudiar la situación real de tus trabajadores: hábitos, aspecto físico, emocional y mental, etc. Es decir, debes hacer un diagnóstico de sus hábitos de salud y bienestar. Para conocer las necesidades de tus empleados, puedes realizar encuestas de satisfacción y de clima laboral. Esto te permitirá crear objetivos reales y desarrollar programas de bienestar eficientes que gusten a tu equipo.

Además es necesario implicar a todos los departamentos en el Plan de Bienestar, esto te ayudará a conocer los problemas del día a día y obtener información que no haya aparecido en las encuestas de satisfacción.

Por otro lado, una parte importante del programa de bienestar es saber comunicarlo. De nuevo, implicar a los departamentos de la empresa, facilitará que todos los trabajadores conozcan las acciones que se van a llevar a cabo y que participen en ellas.

Comunica responsablemente tu Plan de Bienestar

La comunicación del nuevo Plan de Bienestar es una parte fundamental en la implementación del mismo. Es que, sin comunicación la participación sería mínimo o nula.

Cuando se comunica de manera interna, se debe tener en cuenta que los trabajadores son los embajadores de las empresas, por lo tanto, generar engagement con los trabajadores es una decisión correcta si deseamos que la implantación del Plan sea exitosa

Por otro lado, es necesario determinar quién va a emitir y quienes van a recibir los mensajes o la información del Plan. Además, se debe determinar qué mensajes se deben reforzar y qué acciones son necesarias para conseguir un impacto positivo. 

Por lo tanto, una correcta comunicación puede lograr que el empleado valore los beneficios brindados por la empresa. 

¡No olvides de comunicar externamente! La sociedad debe saber que te preocupas por la salud financiera, física y emocional de tus empleados, y esto provocará un aumento en tu reputación corporativa y en tu employer branding.

Haz un seguimiento periódico de los resultados

Los trabajadores y el entorno están en cambio constante, por lo que tienes que adaptar el plan de bienestar de forma continuada.

Además, debes saber si tu programa cubre las necesidades de los trabajadores a corto y largo plazo. Este seguimiento, te permitirá sostener tu inversión a largo plazo.

A continuación, te contamos las métricas que debes tener en cuenta para hacerle el seguimiento adecuado a tu Plan:

  • Feedback/calificaciones de los empleados: es importante obtener feedback regular de los empleados porque la mejor forma de saber cómo se encuentran es preguntar.
  • Nivel de productividad: compara tu índice de felicidad con el éxito de la empresa. ¿Los empleados se sienten a gusto y la empresa puede alcanzar todos sus objetivos?
  • Bajas por enfermedad: esta métrica puede ser indicativa del nivel general de estrés, desgaste y agotamiento de los empleados.
  • Horas extras: si esta métrica es demasiado elevada puede deberse a una carga de trabajo excesiva, a que las prioridades no están bien definidas, los plazos son demasiado ajustados o a una mala gestión.
  • Tasa de rotación: si la tasa de rotación se dispara de repente puede ser producto del descontento generalizado dentro de la empresa.

Implementa un Plan de Bienestar y comienza a incrementar la productividad y la eficiencia de tus trabajadores.

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