La importancia de llevar un estilo de vida saludable
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), hacer ejercicio y alimentarse de manera equilibrada, ayuda en la prevención de enfermedades cardiovasculares, cáncer y diabetes, además de que reduce los síntomas de depresión y ansiedad, y mejora nuestras habilidades de razonamiento, juicio y aprendizaje. Llevar un estilo de vida saludable no es sólo hacer ejercicio y alimentarse bien, también implica cuidar de otros aspectos de nuestra vida que influyen en nuestro bienestar como nuestras finanzas o nuestro entorno. Aunque parece algo complejo, con algunos consejos fáciles de poner en práctica todos somos capaces de estar más cerca de llevar un estilo de vida saludable.

¿Por qué es importante cuidar nuestro bienestar?
Llevar hábitos saludables tiene efectos muy positivos en nuestro bienestar, no sólo físico y mental si no en todas las dimensiones de éste. Comer bien de manera habitual, hacer ejercicio físico regularmente, evitar las sustancias nocivas como el alcohol y el tabaco o relacionarnos con otras personas, por poner algunos ejemplos, nos ayuda a mejorar nuestra calidad de vida. De esta manera evitamos enfermedades a corto, medio y largo plazo, consiguiendo así una salud óptima.
Cómo se relacionan la salud y el bienestar
La OMS define la salud como «un estado total de bienestar físico, mental y social». Esta definición ha entrado en debate en varias ocasiones porque obvia el resto de dimensiones que inciden en el bienestar global y se considera poco clara e incompleta. Aún así, se le agregó la consideración de los derechos básicos y universales, se relacionó con la edad, cultura y responsabilidad personal, y así se llegó a una definición mucho más completa: Salud es el bienestar físico, mental, social y espiritual de toda la comunidad, además del bienestar individual.

10 consejos para llevar un estilo de vida saludable a largo plazo
Aquí tienes una lista de 10 consejos que te pueden ayudar a llevar un estilo de vida saludable que te resulte beneficioso a largo plazo y tenga efecto en tu bienestar.
Comer de manera equilibrada
Hacer ejercicio de manera habitual
Evitar el consumo de sustancias nocivas
Mantener una higiene adecuada
Cuidar nuestra salud emocional
Dormir las horas necesarias
Mantener el cerebro activo
Evitar malgastar
Pasar tiempo con nuestros amigos
Realizar alguna actividad solidaria