La versión corta del actual problema de salud mental es que la crisis económica que ha azotado las vidas de mucha gente durante más de diez años, sumada a la crisis que ha provocado la pandemia de COVID-19, ha provocado una segunda pandemia de problemas de salud mental fruto de estos acontecimientos.
La historia, evidentemente, es mucho más complicada.
Existe una tendencia a la pérdida de la esperanza por el futuro, proveniente del contexto histórico que nos acompaña. Esta mentalidad, extendida en un gran número de personas, alcanza aspectos de la vida como el matrimonio, la paternidad y otras actividades sociales.
Por eso, todas las organizaciones deberían estar preocupadas por la salud mental de sus empleados.
El impacto en el bienestar
Según Gallup, un meta-análisis de 300 estudios concluyó que el estrés crónico se asocia a la supresión de la respuesta inmune del cuerpo en comparación con otras personas sanas.
Además, otro estudio concluyó que un largo período de desempleo es un evento vital mayor del cual la gente no se recupera completamente hasta que han pasado cinco años de sus vidas.
El papel de la cultura organizacional
Aún así, los desempleados no son los únicos que se enfrentan a estos problemas de salud mental. Las personas que tienen un trabajo también se encuentran en riesgo de sufrir problemas emocionales. De hecho, Gallup concluyó a través de un estudio que la gente que trabajaba con un mal líder presentaba un mayor empeoramiento del bienestar que aquellos que no tenían trabajo.

Gallup concluyó que, los empleados que presentaban un nivel de engagement bajo con la cultura organizacional de su organización, eran dos veces más propensos a sufrir depresión y ansiedad y tenían unos niveles de estrés mucho más altos que aquellos trabajadores que tenían un engagement alto.
Estos indicadores se dispararon durante el 2020. Aún así, aquellos empleados que estaban comprometidos con la empresa y con el trabajo que desempeñaban, mostraban muchas menos emociones negativas que aquellos que no lo estaban, incluso en esos tiempos tan duros.
Todos estos datos y estudios ejemplifican cómo de importante es el bienestar laboral para poder llevar una vida próspera. Así, se concluye que el bienestar laboral incide en todos los otros aspectos de la vida de tus empleados, incluyendo relaciones, finanzas, salud y tener un lugar en la comunidad.
Los problemas de salud emocional pueden tener muchas causas, incluyendo rasgos de predisposición, pero la calidad del lugar de trabajo es un factor que los buenos líderes pueden controlar.